Antes de llevar tu coche a la ITV, es fundamental asegurarse de que los neumáticos estén en buen estado. Aquí te explicamos qué aspectos debes tener en cuenta para asegurarte de que tus neumáticos estén en condiciones óptimas para la inspección.
Revisión de los Neumáticos
Para garantizar que tus neumáticos cumplan con los requisitos de la ITV, sigue estos pasos:
- Profundidad del Dibujo: Verifica que la profundidad del dibujo de tus neumáticos sea igual o superior a 1,6 milímetros en toda la superficie de la banda de rodadura.
- Desgaste Irregular: Inspecciona visualmente tus neumáticos en busca de signos de desgaste irregular, como zonas lisas o abultamientos. Esto puede indicar un problema de alineación o suspensión que debería ser corregido antes de la inspección.
- Presión de los Neumáticos: Asegúrate de que la presión de los neumáticos esté dentro de los valores recomendados por el fabricante. Una presión incorrecta puede afectar negativamente al comportamiento del vehículo y aumentar el desgaste de los neumáticos.
Comprobación de la Fecha de Fabricación
En la ITV también se verifica la antigüedad de los neumáticos. Para garantizar su seguridad, es importante verificar la fecha de fabricación, que se encuentra en el lateral del neumático. Se recomienda cambiar los neumáticos cada cinco años, independientemente de su estado aparente.
Consejos Adicionales
Además de estos puntos clave, aquí tienes algunos consejos adicionales para mantener tus neumáticos en buen estado:
- Realiza una inspección visual periódica para detectar posibles daños.
- Rotación de neumáticos cada cierto tiempo para asegurar un desgaste uniforme.
- Evita la sobrecarga del vehículo, ya que puede aumentar el desgaste de los neumáticos.
Siguiendo estos consejos y realizando una inspección regular de tus neumáticos, podrás pasar la ITV sin contratiempos y garantizar la seguridad en la carretera. ¡No te olvides de revisarlos antes de tu próxima cita en la ITV!